viernes, 5 de febrero de 2010

05 de febrero de 2010

05 febrero 2010





Esta noche en particular me has dejado solo, he sentido más tu ausencia esta madrugada que otras noches, quizás sea que esta noche salí a esperarte al jardín, las noches pasadas no había podido salir por la lluvia, pero hoy dejo de llover así que he sacado mi mesita y en la orilla del jardín me he sentado de frente a la Luna a esperarte.



Hace mucho frio, traigo esos guantes que tienen descubiertos los dedos, y una chamarra que la verdad me pesa mucho, aunque no sé si el frio es por lo húmedo del jardín o por tu ausencia, y no sé si me pesa más la chamarra o que no llegues, aun así te he esperado, pero esta noche más que otras he sentido tu ausencia, y me han entrado muchas dudas en la cabeza.




Tu silencio deja paso a esas dudas, porque aunque digo mucho para ti y por ti, aun no he escuchado nada de tu parte, no sé nada de ti, ni siquiera si sabes que estoy aquí, si sabes que te espero, si sabes que te busco, que guardo besos y muchos te amo, que recorro por la sombra las calles para que no sean otros ojos más que los tuyos quienes me descubran esperando, no sé si tú me esperas, sería bueno saber que tú me esperas también, o al menos que sabes que existo, que sabes que soy yo quien guarda un rincón en la Luna para soñar eso que se llama amor.



Quisiera saber aunque sea el nombre de quien camina a tu lado, de aquel que puede verte, de aquel que puede tocarte y besarte, saber si él te hace sentir todo lo que yo quisiera hacerte sentir, saber que eres feliz a su lado, que sonríes al despertar, que te despierta con un beso y un te amo, que te abriga cuando hace frio y empaca tu paraguas en tu bolso para que no lo olvides, que te cuida, que te protege, saber que vale la pena que no llegues porque con el encuentras todo lo que yo quisiera darte, incluso ese beso antes de dormir, incluso esa sonrisa después del tedio de un mal día, incluso fantasías con mañanas, incluso esas cursilerías que no te gustan mucho pero siempre te arrancan una carcajada.



Quisiera saber un poquito, saber que esperarte no es en vano, o porque también me esperas, o porque eres feliz tan lejos, cualquiera de las dos razones esta noche me darían consuelo y hasta una sonrisa como la que le miro a la Luna desde esta mesita en el jardín donde te espero, entre el frío de tu ausencia y el peso de no saber nada de ti.



Pasan ya de las cinco y no llegaste, así que saldré al trabajo pero quiero que sepas que te estaré buscando, por si decides buscarme tu también, quizás al regresar regrese a tu lado, o al menos sin tanto peso que esta noche en particular siento por no saber de ti.



...



P.D.: Donde quiera que estés deseo que el viento te diga que sigo esperándote, que te amo y espero que algún día lo sepas y que sirva de algo, aunque sea para hacerte sonreír, aunque sea para que me ames un poquito y decidas llegar.




...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

aich! me parece conocido este lugar... debe ser el color. Blanco... ¿por qué se parece tanto al mío? ja! ¿por qué ahora te animas escribir un diario? -de esos, que no son privados ni prohibidos para ojos ajenos-... ¿cuánto es 19 por 7?¿Cuántas chupadas para llegar al centro de una tutsi pop? ¿y de una paleta robot? :)

Ameyali G. dijo...

A PESAR DE LA ESPERA SIN RESULTADO PARECE QUE FUE LINDA TU VELADA, EL JARDIN, LA LUNA, TU, UNA MESA, SUENA MUY BIEN...

SALUDOS NOMITO LINDO :)

Anónimo dijo...

ojala pase mas tarde y vea que tu dia cambio de color.

COPY...WHAT?

Creative Commons License Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.